Transgresor, esotérico y gran místico.
“Cuando dudes en actuar, siempre entre hacer y no hacer, escoge hacer, si te equivocas tendrás al menos la experiencia”
-Alejandro Jodorowsky.
Desde muy joven Jodorowsky se dio cuenta de dos cosas, sí quería salir adelante sólo tenía dos caminos: la inteligencia y la imaginación; así que un día, a la edad de 20 años, quemo todas sus fotografías y se fue de Chile jurando no regresas hasta que fuera un hombre de éxito.
Siendo desde muy joven un artista polifacético, comenzó incursionando en el arte con la poesía a la edad de 16 años, cuando cumplió 17 años debuto como actor y un año después creo la tropa pantomima “Teatro mímico”. En el año de 1953 escribe su primera novela “El Minotauro” y se va a estudiar a París; comienza a realizar presentaciones de pantomima con su compañía por todo el mundo, y al llegar a México en 1960, decide quedarse y experimentar una nueva cultura.
Se intereso profundamente por la psicología, lo místico, la meditación Zen y con la ayuda del maestro Ejo Takata, en el territorio de la psicología se hizo amigo de Erick Fromm que vivía en Cuernavaca por aquel entonces.
Durante las siguientes dos décadas, Jodorowsky creó más de cien obras teatrales. Además de crear más de veinte series de comics, siguió desarrollándose como dramaturgo, actor, poeta, para más tarde convertirse en director de cine con su primera película “Fando y Lis”, grabada en 1968, siendo una adaptación de la obra homónima del escritor Fernando Arrabal.
La obra fue protagonizada por Sergio Kleiner, Diana Mariscal, Sergio Ramos “el comanche”, su esposa Valerie y Juan José Arreola, y se proyecto durante el festival de Acapulco, pero Jodorowsky tiene que salir huyendo de este, porque lo querían linchar, inclusive “el indio Fernández”. Indignado por las imágenes de la película saco su pistola y lo intento matar, pero Alejandro logro escapar.
Es entonces que su estilo de cine comienza a llamar la atención por ser transgresor, sobrecargado, impactante, con un alto contenido simbólicamente esotérico, creando extraña atmosfera de simbolismo y surrealismo.
En 1970 llega su segunda película titulada “El Topo”, western que se convirtió en la primera película de culto del cine, cuenta Alejandro que después de que John Lennon presentara su película pidió al publico que se quedara para presentarles una magnífica película, la función se dio a las 12 de la noche y, a partir de eso, esa hora se denomino “la misa de media noche”.
John Lennon ofrece entonces a Alejandro financiar parte de su siguiente película, “La Montaña sagrada”, y para el papel principal se contemplo al actor George Harrison, pero este no quiso salir en la película por una escena donde tenía que salir a cuadro su ano cuando una sirvienta lo bañaba, y como Harrison se negó a hacer la escena, Alejandro se negó a darle el papel.
En 1973 se estrena “La Montaña sagrada”, que se realizo entre EU. Y México, el cineasta trabajo en ella más de 5 años, invitando a participar a personas de la talla de Orson Wells y Salvador Dalí, e involucrando también a Chris Foss, Pink Floyd y H.R. Ginger y al dibujante francés Moebius.
En 1989 rueda nuevamente en México su cuarto largometraje “Santa Sangre”, producida por Claudio argento y protagonizada por sus hijos de Alejandro Cristóbal y Adán.
Tras diferentes proyectos no tan bien recibidos Alejandro comenzó a trabajar en diferentes proyectos como el desarrollo de su ciencia: la Psicomagia, una técnica creada y ejercida por Alejandro que pretende servir de sanación espiritual, también busca resolver problemas psicológicos y somáticos, el mismo Jodorowsky reconoce que no está situada en un plano científico.
Jodorowsky explica que sumerge las raíces de esta ciencia en el chamanismo, el tarot, psicoanálisis y el efecto del teatro, Jodorowsky fundamenta su metodología en la premisa de que el inconsciente toma los actos simbólicos como sí fueran hechos reales, de manera que un acto mágico simbólico podría modificar el comportamiento del inconsciente, así de impactante y esotérico continua siendo Alejandro a través de los años y, sin embargo, no se le niega que él siempre será como un buen vino, entre más maduro más interesante y delicioso.
En la actualidad Jodorowsky vive en Vicenses, cerca de París, donde da clases de tarot y conferencias sobre sus teorías “La psicomagia y la psicogenealogía”, y por las tardes se le puede encontrar tomando café en el café “Le Temeraire” de la avenida Daumesnil.
Gabrielle Vallejo M.
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